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(CNN Español) – Abril Bogado, de 12 años, fue asesinada en medio de un asalto el domingo en la puerta de su casa en la ciudad de La Plata, al sur de la capital argentina. Recibió un balazo en la cabeza y su crimen tiene en vilo a la sociedad. Pero no solo por el hecho de la inseguridad, sino también por el accionar de la justicia.

Es porque el principal sospechoso, que confesó el crimen y habérsele “escapado un tiro” cuando fue detenido este lunes, gozaba de una libertad anticipada concedida por José Villafañe, juez de Ejecución Penal del juzgado n°2 de La Plata.

Según reporta la agencia oficial Télam, José Edgardo Etchegaray Biel, alias “Pepito”, de 32 años, tenía antecedentes delictivos y desde 2010 debía cumplir una condena en prisión hasta 2018 por tentativa de homicidio y robo calificado. Pero fue liberado en 2015 por el juez Villafañe, pese a que el informe del Servicio Penitenciario le recomendaba lo contrario.

Por esta situación, los vecinos de la zona se concentraron en el lugar donde ocurrió el crimen para reclamar justicia y el caso reabrió el debate público en torno al accionar judicial en relación a la liberación de condenados.

El jefe de los fiscales de la Provincia de Buenos Aires, Julio Conte Grand, afirmó en varios medios locales que iniciarán una investigación para determinar si el juez Villafañe cumplió los pasos previos a la otorgación del beneficio de la libertad condicional.

Conte Grand explicó que los informes no son vinculantes y que la decisión depende del juez, pero debe fundamentar su resolución. El juez Villafañe, por el momento, no ha hecho declaraciones públicas.

Desde la Asociación Madres del Dolor, a la que pertenecen familiares de víctimas de distintos delitos, emitieron un duro comunicado en el que critican el accionar de este juez.

“Ahora van a decir que lo que hizo el juez es lícito, dentro de los parámetros de la ley. Pero son los jueces quienes tienen que determinar dentro de lo lícito, qué es honesto, qué va de la mano con el sentido común. ¿Es lógico que un condenado por 3 delitos tenga un beneficio? NO”, sostuvieron y recordaron que este tipo de situaciones se reiteran.

Como el feminicidio de la joven Micaela García, ocurrido en abril en Gualeguay, provincia de Entre Ríos. En su caso, el asesino también estaba en libertad condicional a pesar de que el Servicio Penitenciario también lo desaconsejaba.

Sebastián Wagner, que hace menos de un mes fue condenado a prisión perpetua por este crimen, estaba preso desde 2012 por varios delitos de violación y su condena debía finalizar en 2018. Pero dos años antes, en julio de 2016, otro juez le había concedió la libertad. En ese lapso mató a García.

Ese magistrado es Carlos Rossi, que luego del feminicidio pidió licencia y actualmente afronta un jurado de enjuiciamiento por esta resolución y otras denuncias en su contra. Rossi sostiene que cumplió con la ley y la jurisprudencia vigente.

Tanto Rossi como Villafañe son jueces de ejecución penal y son los que deben velar por el cumplimiento de las condenas de los detenidos.

Para las Madres del Dolor los jueces deberían ser más cautos a la hora de permitir la libertad anticipada de condenados. “¿Cuándo van a entender los jueces que una irresponsabilidad suya destruye vidas? ¡Los jueces matan con sus firmas! Se sigue engrosando la lista de jueces que causan asesinatos y violaciones”, sostuvieron.

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