El Frente Amplio irrumpió en la carrera presidencial con la entrada de Beatriz Sánchez. Y la preocupación crece en la Nueva Mayoría. Hoy el ex presidente Lagos emplazó al Frente Amplio a enfrentar a la derecha, y la respuesta del diputado Boric fue demostrativa.
Al contestarle que enfrentarán a la derecha, pero también a quienes privatizaron o crearon el CAE. Es que el Frente Amplio es una oposición muy distinta a la que la ex concertación estaba acostumbrada a tener en su flanco izquierdo.
Lagos y Bachelet ganaron sus segundas vueltas contando con ese voto, que rechazaba tajantemente a un posible gobierno de derecha. Pero para las nuevas fuerzas que componen el naciente Frente Amplio, en cambio, ese tabú no existe.
De hecho, el inicio de su relevancia comenzó precisamente con Piñera en el gobierno, cuando el movimiento estudiantil sentó las bases del Frente. Para ellos la apuesta es a largo plazo, y parte por conservar la unidad tan difícil en el archipiélago de grupos que es la izquierda.
Algo que aún es incierto. Beatriz Sánchez copó las redes sociales ayer, opacando incluso el lanzamiento del ex pdte Piñera. Pero para ganar elecciones no basta con trending topics.
Se requiere un trabajo territorial, de equipos y despliegue en todo el país, que esa candidatura está muy lejos de tener. Sólo si logran armar una candidatura competitiva, podrán hacer creíble su apuesta de largo plazo, que es convertirse en un Frente realmente Amplio, capaz de romper a la Nueva Mayoría y de ser una alternativa realista de gobierno.
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