El proyecto ahora cuenta con indicaciones sobre la propuesta original en torno al Servicio de Impuestos Internos.
Como una muestra de disposición al diálogo fue considerada la serie de indicaciones que el ministerio de Hacienda, Alberto Arenas, introdujo a las nuevas facultades fiscalizadoras del Servicio de Impuestos Internos en la reforma tributaria.
Una de ellas es la delimitación de las multas que podrían recibir las personas jurídicas o naturales que hayan elaborado un mecanismo para no pagar impuestos, acotando dicha responsabilidad a quien diseñe o planifique un eventual esquema elusivo.
Una modificación, que según expertos, podría generar dudas en las empresas que buscan restructurarse con fines económicos. Además está que ahora no se permitirá el acceso del SII a la información de tarjetas de crédito y débito, así como que ya no se podrá terminar el giro de una empresa si no responde a una citación en un mes.
No obstante, las posibles sanciones a quienes colaboren en el diseño de prácticas para eludir impuestos generan dudas mayores entre los expertos. Especialmente porque consideran que las normas que combatan la evasión y elusión de tributos sólo se conseguirá con más fiscalizadores en las calles y oficinas de los que hay actualmente.
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